lunes, 20 de octubre de 2008

Los discordes en concordia en paz y amor se juntaron y pueblo de paz fundaron, para perpetua memoria


Hoy 20 de Octubre del año 2008 y recordando ésta máxima que refleja la fundación del Departamento de La Paz, las fuerzas políticas que desataron un feroz enfrentamiento en diferentes puntos de este país durante los últimos dos años a partir del debate acerca de la nueva Constitución Política del Estado, concurrieron en puntos de encuentro que le devolvieron la certidumbre a todos aquellos bolivianos y no bolivianos que tenían puestas sus esperanzas en el dialogo que desde hace meses se había instalado y que no había mostrado aun frutos de consenso. Esta certidumbre no es otra cosa que la voluntad de las fuerzas políticas bolivianas de resolver sus diferencias ideológicas y políticas de forma pacifica y además concertada. Bolivia ha vivido los últimos meses zozobra generada por enfrentamientos que cobraron varias vidas de compatriotas que ofuscados en defender sus reivindicaciones no midieron en sus actos, desplazándose hacia el limite de la convivencia pacifica desatando verdaderos combates en calles, plazas y campos. Sin embargo cuando nos percatábamos de los límites rebasados y de los ideales en riesgo, era necesario hacer un alto y medir nuestras acciones en pos de no poner en riesgo nuestro supremo fin: alcanzar el bienestar de nuestros compatriotas. Así, el oficialismo y la oposición dan un giro en su accionar y le regalan a su pueblo un acuerdo que nos muestra un nuevo escenario.
Por el lado del oficialismo este giro en el accionar significa el entendimiento de que la democracia ya no es la dictadura de las mayorías sobre las minorías, por el contrario significa que en la visión institucionalizada de las mayorías debe incorporarse las posiciones de las minorías que las haga parte del rumbo zanjado por las vanguardias, alcanzando una convivencia que refleje un principio de conducción de la pluralidad.
Del mismo modo la oposición marca un nuevo momento en su desarrollo político, y es que a partir de la viabilizacion de este acuerdo comprenden que su accionar y desempeño político es a partir de la agenda definida por las mayorías de esta nación, reconociendo de los gobernantes su legitimidad en la visión que en las urnas halló su derecho.
Estos dos giros en la política nacional no es otra cosa
que la superioridad del debate por sobre el uso de la fuerza,
que la primacía del entendimiento por sobre el enfrentamiento,
que la superioridad de la democracia por sobre la dictadura y finalmente que el bienestar de nuestro pueblo esta por encima de los intereses de grupo o individuales.